Cuándo leer, cantar y contar cuentos con su hijo

La hora de acostarse, la hora del baño, la hora del orinal, en el tren, en el autobús, en el coche, en el parque, en el cochecito, en la cuna, cuando estás en la sala de espera del médico de cabecera ... cualquier momento es un buen momento. para una historia! Puede hacer que los libros formen parte de su rutina diaria : llévelos con usted para compartirlos y disfrutarlos en todas partes.

Saber cuándo detenerse puede ser tan importante como encontrar el tiempo para compartir una historia en primer lugar. Preste atención a la reacción de su hijo a la historia y deténgase si su hijo no lo disfruta esta vez. Siempre puedes probar un libro, una canción o un cuento en otro momento.

Si no tiene un libro o no puede inventar una historia en el acto, no se preocupe porque estos cuentos cortos infantiles son la mejor elección para leerles antes de irse a dormir a la cama. Hay muchas otras formas en que usted y su hijo pueden compartir letras, palabras e imágenes. Por ejemplo, puedes mirar:

Los padres de estos días recurren a la conveniencia que ofrece la tecnología para hacer que sus hijos se duerman. Bueno, admitámoslo. Es muy fácil para los niños quedarse dormidos después de ver un video o sus dibujos animados favoritos. Estas cosas pueden considerarse un escueto placer de la niñes, pero nada se compara con la belleza de contar historias para nuestros hijos. Como padre, ¿cuánto tiempo dedica a contar historias con su hijo?

La narración de historias juega un papel fundamental en el desarrollo general de su niño en edad preescolar. Ya sea que sea tan simple como hablar sobre su infancia o compartir una historia divertida sobre su día, la narración ofrece varias ventajas para los niños.

A los niños pequeños les encanta escuchar historias. Cuando invertimos el tiempo adecuado para contar historias / cuentos con ellos, está inculcando virtudes que pueden llevar consigo a medida que envejecen. Cuénteles historias con personajes cuyos valores puedan emular o historias con mensajes significativos. Tomarse un tiempo para hacer esto con los niños inculca lecciones valiosas y les ayuda a aprender sobre la bondad, la sabiduría, la honestidad, la compasión y más.

No siempre es fácil mantener la atención de un niño durante mucho tiempo. A muchos niños les resulta difícil o complicado poder concentrarse en algo durante un período de tiempo prolongado. O intervienen y hablan más o sus mentes terminan divagando en otro lugar. Sin embargo, contar historias con su hijo puede ayudarlo a mejorar sus habilidades para escuchar . Se volverán más atentos y ademas el niño aprenderá a concentrarse más en un tema determinado.

Cuando se les cuenta a los niños una historia, les hace imaginar que están dentro con los personajes, la trama, el escenario, etc. Es muy diferente a que el niño mire algo en una pantalla. La narración anima a que la imaginación de los niños se vuelva loca a medida que se desarrolla la historia. Pueden imaginar la historia como quieran que se vea en sus cabezas. Incluso puede mejorar su creatividad y hacerlos abiertos a nuevas ideas.

Contar historias abre los ojos de los niños pequeños a cosas nuevas: lugares, cultura, tradiciones. Les hace imaginar que están en el lugar de los personajes de la historia, lo que desarrolla su empatía mientras intentan comprender sus acciones.

Leer y contar cuentos a los niños puede aumentar su capacidad para expresarse. Les anima a comunicar sus pensamientos, sentimientos e ideas. Al contar historias, asegúrese de animar a su pequeño a hacer preguntas o discutir sus pensamientos. A medida que continúe disfrutando de una actividad de narración de cuentos con su pequeño, ellos tendrán un vocabulario más amplio a medida que vayan aprendiendo nuevas palabras.

Contar historias es una forma excelente de agudizar la memoria de su hijo. Cuando les lea una historia, puede hacer una revisión o pedirles que recuerden algunos de los detalles. Hágales preguntas y vea cuánta información han retenido.

Contarle historias a tu pequeño es un trampolín para el aprendizaje académico futuro . Es una buena forma de ayudarlos prepararlos como niños para la escuela porque hace que el aprendizaje sea más fácil y natural. Como se mencionó anteriormente, contar historias ayuda a aumentar el enfoque y la concentración de un niño, lo cual es muy importante cuando comienzan a asistir a la escuela.

A través de la narración, los niños aprenden a prestar atención y escuchar activamente a la persona que habla. Aprenden a ser más pacientes al escuchar a los demás hablar. También les abre los ojos a los pensamientos de otras personas y comprenden cómo varían las opiniones de cada uno.

La narración de cuentos puede enseñar a los niños pequeños muchas cosas sobre el mundo y la vida. Les brinda muchas oportunidades para aprender ideas maravillosas y cosas que nunca antes habían encontrado. Dados estos beneficios, los padres tienen todas las razones para dedicar el tiempo adecuado a contar historias con sus hijos.